sábado, 25 de enero de 2014

Volveremos a esa Luz ...


... Cuando esa sensación de desasosiego me golpea de repente, dejándome fuera de lugar en mi propio camino, sin saber cuál es el rumbo a seguir, con eso que siento como un velo negro ante mis ojos ... 

.... me paro a sentir ....

... Trato que poco a poco, y a su ritmo, vuelvan a mí  recuerdos que siento míos, aquellos que siento que me pertenecen, en donde fui yo a buscarlos a ellos, y no ellos a mí, siendo consciente de nuestra capacidad siempre de elegir ... En ellos no había influencias ... formaban parte de mi esencia ... yo fui a buscarlos para poder disfrutarlos ... de una forma natural y fluída, sin propósitos ...

... Busco aquellos en los que me siento feliz y libre, aquellos en los que no había ningún objetivo a destacar ... tan sólo el de ser yo sin expectativas, y así disfrutar del momento ... Entre todos ellos, puedo destacar una emoción, un olor, una sensación en mi cuerpo, un sonido, una compañía, una actividad, un lugar, un corte de pelo, un tipo de ropa, ...  Todos y cada uno de ellos son míos... y al volver a sentirlos, los disfruto ... disfruto de mi esencia, y me recuerdo que el mejor rumbo al que dirigirme no es otro que mi propio ser, con la tranquilidad de permitirme mi propio ritmo, mi propia esencia, mi propia manera de ver y experimentar el mundo, y me digo a mí misma:

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